¿Quién te modifica?

 

En retrospectiva, muchas han sido las personas que me han moldeado, guiado y enseñado en mi vida. Para cosas buenas y malas. Pero, ¿qué he conservado? O mejor dicho ¿qué he dejado pasar y qué me he apropiado como mío? Y para ir más profundo: ¿Qué he aportado?

Mi carácter sin duda lo he ido moldeando y aterrizando conforme pasan los años, de acuerdo a las circunstancias y también por medio del dicho "la burra no era arisca, hasta que la hicieron".

Contemplar mi físico al completo ha sido en cambio, muchas veces, a través de los ojos ajenos, porque para hacerlo a través de los míos, se ha vuelto una tarea compleja. Han pasado muchas anécdotas como para decir que solo me veo al espejo y no noto las alegrías y los males por los que ha vivido.

La suma en sí de ambas, mente y cuerpo, me hacen a mí un ser único e irrepetible, porque no todos pasamos por las mismas experiencias en tiempos exactos ni con personas igual de cálidas y monstruosas.

Tenemos que madurar y dar paso a la rotura del cascarón, pues se espera mucho de cada individuo sin detenerse a preguntar si eso era lo que realmente deseábamos.

Hay que tener el coraje suficiente para decir "esto si y esto no" o por lo menos el "esto no me conviene". ¿Por qué? ¡Simple! Por amor propio.

Decide mostrarte al mundo tal cual eres y disfruta de tu sola compañía. Saber quién eres te permite desarrollar amistades mucho más fuertes y duraderas, porque estás bien clavado en la tierra y puedes disfrutar de una vida mucho más sencilla y cálida. Porque tú primera fuerza, eres tú.

Excelente semana y nos leemos pronto.